29 de enero de 2014

¿Como encontrar tu fuerza de voluntad?

La fuerza de voluntad esta íntimamente relacionada con los siguientes elementos: 

  • Nuestra motivación
  • Autoestima
  • Tolerancia de la frustración
  • Creencias respecto al cambio,éxito y fracaso.


Cuando sentís que te falla la fuerza de voluntad, pregúntate a qué crees que se debe.¿Tal ves no estas motivado, porque no es algo que vos  realmente deseas?
¿Quizás consideras que no vale la pena el esfuerzo?
¿Que el costo es mucho mayor  que el beneficio?
¿O crees que no vas a poder lograrlo?
Si es así,¿ por qué lo crees?
¿ Pensas que no podes soportar el malestar momentáneo que implica hacer el esfuerzo?
¿No sabes como hacerlo?

Adopta una actitud positiva.
Confía en que sí podes lograr lo que te propongas
Sólo tenes que aprender a vencer dichos obstáculos y creer en vos.

No te regañes por lo que no hiciste.
No busques ejemplos que demuestren que, como no lo has logrado en el pasado, no lo vas a logar en el presente o en el futuro.

Recuerda que tu conducta es el resultado de lo que has aprendido.
Todo aprendizaje puede ser sustituido por uno nuevo.

No confundas la fuerza de voluntad con el sacrificio y el sufrimiento que pensas que esto implica.

Para aprender una conducta o un nuevo hábito, tenemos que practicar, equivocarnos, corregir los errores y seguir practicando....

Todos tenemos facilidad para hacer algunas cosas y dificultad para otras.
Lo importante no es hacer sólo lo fácil. Y tomar la acción!!
Lo verdaderamente importante, es hacer lo que necesitamos para estar mejor.
Las cosas son difíciles cuando no sabemos hacerlas y se vuelven fáciles cuando aprendemos a realizarlas. 




6 de enero de 2014

MITOS Y VERDADES DE LAS DIETAS PARA DEPORTISTAS


Se suele creer que una dieta recomendada para deportistas es aquella que contiene grandes cantidades de proteínas; sin embargo esto no es del todo cierto, ya que entre el 50 y el 60% de la energía debe provenir de alimentos ricos en carbohidratos (pan, arroz, pasta, cereales, frutas, papas…), que posteriormente se transforman en glucosa.

Es recomendable ingerir las raciones de energía que se sugieren y variar las raciones de hidratos de carbono de acuerdo al apetito de cada persona. Se aconseja llevar un control semanal del peso para conocer las necesidades energéticas.

La dieta debe ser ALTA en:

Carbohidratos : el 50-60% de las necesidades de energía deben provenir de alimentos ricos en carbohidratos, ya que se transforman posteriormente en glucosa, que es la fuente de energía preferida para que trabajen los músculos. Estos alimentos son el pan, arroz, pasta, cereales, frutas, legumbres y tubérculos. Se pueden ingerir raciones adicionales de carbohidratos unos días antes de la competición, para saturar el hígado y los músculos de glucógeno.
Líquidos: debe mantenerse el cuerpo bien hidratado durante y después de los entrenamientos y las competiciones. Hay que controlar el consumo de bebidas que contengan cafeína.

La dieta debe ser BAJA en:

Grasas: deben evitarse alimentos con alto contenido de grasa. El consumo de una pequeña cantidad de grasa es necesaria para una buena salud, especialmente para la absorción de las vitaminas liposolubles. La grasa no es una buena fuente de energía para el trabajo muscular, por lo que es conveniente consumir alimentos con bajo contenido de grasas y evitar el uso de grasa adicional como la mantequilla, margarina, crema y mayonesa.

La dieta debe ser MODERADA en:

Proteínas: los atletas de resistencia necesitan incrementar sus raciones de proteínas para asegurar una adecuada recuperación de los músculos después del ejercicio. Para esto no es necesario incrementar el consumo de proteínas con suplementos proteínicos, simplemente consumir mayor cantidad de alimentos con proteínas. Se recomienda una ingesta diaria de una ración de proteína por cada 5-8 Kilogramos de peso corporal, donde una ración equivale a 30 gramos de carne roja, pollo sin piel o pescado, un huevo entero o 250 mililitros de leche descremada.
Fibra: los atletas de resistencia generalmente necesitan ingerir mayor cantidad de alimento, por lo que no es conveniente el consumo de alimentos con alto contenido de fibra.